Sin duda alguna la felicidad es el motor que nos mueve, lo que buscamos, consiente o inconscientemente, el destino de este largo e intenso camino llamado “Vida”, pero, ¿Qué hay de aquellas personas que tienen una vida corta o aquellas que mueren a poco tiempo de nacer? Me es posible bifurcar en dos posibles situaciones:
1.- Algún agente intangible dentro de la esencia misma de la vida merma la posibilidad al individuo de proseguir o comenzar el camino hacia la felicidad.
2.- El individuo está por sobre la naturaleza terrenal y logra de manera eficiente y al mismo tiempo de modo místico ese destino inefable.
Ahora bien, aquellas personas que logran emprender este camino deben tener en cuenta dos grandes palabras a seguir en la extensa búsqueda y están relacionadas netamente con el modo de abrirnos caminos, vale decir, con “Simpleza” o “cabalidad”. Dejamos que todo fluya de manera innata o nos hacemos de esos caminos con mucho empeño, con mucho ahínco, poniendo uno cuanto está de su parte. Pero, ¿Y si la solución es un poco de ambas?...
La Felicidad Como estado.
“La felicidad es un estado de ánimo caracterizado por dotar a la personalidad de quien la posee de un enfoque del medio positivo y un estado de paz interior. Es definida como una condición interna de satisfacción y alegría.”
El Positivismo además de ser una corriente filosófica, es la esencia misma del encuadre personal para con el medio o entorno que nos genere la sensación del estado Feliz (fugaz, efímero) al margen de la felicidad como noción final anteriormente explayada.
Ser Positivo no es parte del azar, es una condición, es elegir vivir de una forma armoniosa y alejada de lo común que cree la gente son sus problemas siendo estos también estipulados por si mismos. Ante esto: ¿Elijo vivir bien o atormentado? Lamentablemente en la vida no se nos presenta esta circunstancia como una pregunta así de simple, por ende errar nuestra opción no sería muestra de brutalidad.
Un poco de Filosofía
“En la filosofía griega clásica hay tres posturas:
• Ser feliz es autorrealizarse, alcanzar las metas propias de un ser humano.
• Ser feliz es ser autosuficiente, valerse por sí mismo sin depender de nada ni de nadie.
• Ser feliz es experimentar placer intelectual y físico y conseguir evitar el sufrimiento mental y físico.”
Como decía Aristóteles,
“todos estamos de acuerdo en que queremos ser felices, pero en cuanto intentamos aclarar cómo podemos serlo empiezan las discrepancias.”
Concluyendo, la felicidad es el eslabón perdido, es una imponderable en nuestras vidas, desde tiempos recónditos se le viene buscando un significado universal o convergir en ciertos aspectos, siendo concretos podemos convenir en algo, cada cual tiene su significado, cada cual lo busca a su manera y cada cual opta por el camino que desee. La subjetividad de la felicidad estable hace de ella que no exista una receta pues, es única para cada individuo.
